23 de enero 2025
La fotosíntesis es un proceso vital en la naturaleza. Las plantas captan la luz del sol y la convierten en energía para crecer y producir frutos. Sin la luz, las plantas no podrían sobrevivir. ¿Sabías que nuestra vida espiritual funciona de manera similar? Necesitamos estar expuestos a la "Luz de Cristo" para crecer, fortalecernos y dar fruto.
"Yo soy la luz del mundo. El que me sigue no andará en tinieblas, sino que tendrá la luz de la vida." (Juan 8:12, NVI)
Así como las plantas buscan la luz para vivir, nuestro espíritu necesita de la presencia de Dios para florecer. Sin la luz de Cristo, caemos en la oscuridad, nos marchitamos y perdemos la dirección.
Busca la luz de Dios diariamenteDedica tiempo en oración y lectura de la Palabra. La Biblia es esa luz que alimenta tu alma. (Salmos 119:105).
Permanece conectado a la fuenteAsí como una planta no puede producir frutos si no está expuesta al sol, nuestra vida no dará fruto si nos alejamos de Dios (Juan 15:5).
Absorbe la energía del Espíritu SantoPide al Espíritu Santo que te renueve cada día, llenándote de fuerza y propósito para crecer.
Produce frutos para bendecir a otrosUna planta sana produce fruto abundante, y un corazón lleno de la luz de Dios dará frutos de amor, paz, bondad y paciencia (Gálatas 5:22-23).
Mantén tus raíces firmesUna planta bien enraizada en tierra fértil puede aprovechar mejor la luz. Así también, nuestra fe debe estar bien fundamentada en Cristo para resistir las tormentas de la vida (Colosenses 2:7).
OREMOS:
Señor, tú eres la luz que guía mi camino. Ayúdame a permanecer expuesto a tu presencia, a absorber tu verdad y a dar frutos que glorifiquen tu nombre. No permitas que me aleje de tu luz. Renueva mi espíritu y lléname de tu paz. En el nombre de Jesús, amén.
Gracias Jesús por darle Luz a mi camino. 🚦🔴🟡🟢
Amén. Gloria a Dios
Amén 🙏 que bello eres Dios
Se mi Luz, mi Rey, que todo lo que hagan mis manos te glorifique a ti y tome decisiones guiadas por tu Santo Espíritu!
Amén hoy permanezco en tu luz para dar fruto que perduré para Tu honra y gloria