Dios no te debe nada… pero te da todo

18 de julio 2025

"Pues por gracia ustedes han sido salvados mediante la fe; esto no procede de ustedes, sino que es el regalo de Dios."— Efesios 2:8 (NVI)

Vivimos en un mundo donde todo funciona por méritos: si trabajas, te pagan; si te esfuerzas, te premian; si eres bueno, te felicitan. Por eso, a veces sin darnos cuenta, queremos trasladar esa lógica a nuestra relación con Dios. Pensamos: “Si hago todo bien, Dios tiene que bendecirme” o “Si sirvo mucho, Dios tiene que responderme como yo quiero.”

Pero la verdad es que Dios no nos debe nada.Él no nos ama porque seamos buenos, ni nos bendice porque lo merezcamos. Todo lo que tenemos —vida, propósito, amor, salvación— es un regalo inmerecido.

La cruz no fue un pago de Dios hacia nosotros, fue una entrega de amor puro y desinteresado.Y eso cambia todo… Porque cuando entiendes esto, dejas de vivir tratando de “ganarte” el favor de Dios y empiezas a disfrutar la libertad de ser amado sin condiciones.

No hacemos cosas para que Dios nos bendiga.Hacemos cosas porque ya somos bendecidos. No obedecemos para que Él nos ame.Obedecemos porque Él ya nos amó primero.

Dios no te debe nada… pero te ha dado TODO.

Oración:

Señor, gracias porque todo lo que tengo es por tu gracia. Ayúdame a no vivir creyendo que debo “ganarme” tu amor. Enséñame a disfrutar de tu bondad y a responder con gratitud y obediencia.