20 de enero 2024
Compartir el mensaje de Jesús con el mundo es una misión esencial para los creyentes. Sin embargo, antes de predicar a otros, es vital predicar primero a nuestra propia vida. Esto significa aplicar las verdades del evangelio en nuestro corazón, renovar nuestra mente con la Palabra de Dios y vivir en el poder del Espíritu Santo. Solo así, nuestras palabras tendrán autenticidad y nuestro testimonio será un reflejo genuino de Cristo.
Antes de hablar a otros de Jesús, debemos permitir que la Palabra hable a nuestro interior. "Me deleito en tus decretos; no olvidaré tu palabra" (Salmos 119:16, NVI).
La Biblia es la guía que nos transforma y nos da la verdad que necesitamos compartir. Predicar a nuestra vida implica recordar diariamente quién es Dios, quiénes somos en Cristo y cómo Él nos llama a vivir.
No solo se trata de leer la Palabra, sino de dejar que moldee nuestras actitudes y acciones. Santiago 1:22 nos recuerda:"No se contenten solo con escuchar la palabra, pues así se engañan ustedes mismos. Llévenla a la práctica."
La transformación personal es un testimonio poderoso. Cuando vivimos de acuerdo con lo que predicamos, nuestras acciones hablan más fuerte que nuestras palabras.
Cuando predicas a tu vida, estás listo para predicar a otros. El apóstol Pablo dijo:"Porque no me avergüenzo del evangelio, porque es poder de Dios para la salvación de todos los que creen" (Romanos 1:16, NVI).
La clave está en hablar desde lo que has experimentado. Si Cristo ha transformado tu vida, tu testimonio será un faro que ilumina a quienes necesitan esperanza y salvación.
Oremos:
Señor, ayúdame a predicar tu verdad a mi corazón todos los días. Transforma mi vida con tu Palabra y úsame para ser un testimonio de tu gracia y amor. Dame valentía para compartir el evangelio con otros y vivir de manera que mi vida refleje a Cristo. Amén.
Amén 🙏 Wow! Que mensaje tan especial gracias Dios por este tiempo🙏
Así es mi Rey, debí ser testimonio de lo que has hecho en mi🤩
Ayúdanos Señor. En el nombre de Cristo Jesús.
Dios ayudame a levantar mi voz, que pueda tener los zapatos verdes de tu amor
Aquí estoy Señor. Necesito más de ti y menos de mi. Que yo pueda escuchar tu voz para que otros me escuchen. Te amo mi Jesús ❤️💥