Plantar

2 de marzo 2025

Salmos 1:3

3 Son como árboles plantados a la orilla de un río,

    que siempre dan fruto en su tiempo.

Sus hojas nunca se marchitan,

    y prosperan en todo lo que hacen.

Dios nos invita a través de este salmo a que reflexionemos como estamos plantando en nuestra vida.

Plantar: meter en la tierra una semilla para que se arraigue.

Haciendo una analogía nuestro corazón es el terreno para plantar y nosotros decidimos la clase de semilla que plantamos en ese terreno.

En el versículo uno de este Salmo dice que para tener una buena siembra no debemos seguir el consejo de los malos, ni andar con aquellas personas que han decidido tener un estilo de vida apartados de Dios ya que para ellos no hay deleite en lo que está escrito en la palabra de Dios.

Por otra parte el hombre que es justo es decir que toma la decisión de seguir el camino de Dios y caminar en obediencia es comparado como un árbol útil y fructífero, que siempre dará fruto, y que su vida no se marchitará y será próspero.

Nuestra vida sin Cristo se marchita y eso éramos antes, pero cuando tenemos un encuentro personal con Dios la visión de plantar cambia en nuestras vidas.

Hoy anima a alguien que posiblemente conociendo de Dios en algún momento de su vida se apartó y empezó a sembrar en un terreno infertil.

Oremos

Señor gracias por haberte revelado a mi vida te pido que no permitas que mi siembra sea inútil sino por el contrario este siempre regándose con el agua de Tu espíritu y Tu consejo, deseo ser tu instrumento para que muchos más aprendan a sembrar de la manera correcta.