top of page

SÁNAME

  • Foto del escritor: pastorarielcastro
    pastorarielcastro
  • hace 2 días
  • 1 Min. de lectura

lunes 5 de mayo 2025


“Señor, mi Dios, a ti clamé por ayuda, y me sanaste.”— Salmo 30:2 (NVI)


Nuevo video, miralo aquí:


Hay momentos en los que nuestro cuerpo, mente o corazón gritan por alivio. El dolor puede ser físico, una enfermedad prolongada; emocional, por una pérdida o una traición; o espiritual, cuando sentimos que Dios está lejos.


Pero en todos esos momentos, hay una sola fuente de sanidad verdadera: Jesús.


El salmista no se guardó su dolor. No trató de resolverlo todo solo. En vez de eso, clamó al Señor, con sinceridad y fe. Y Dios respondió.


Dios sana heridas que nadie ve. Él restaura lo que parecía perdido. Él renueva fuerzas cuando ya no queda nada. A veces lo hace de forma instantánea; otras, a través de un proceso. Pero siempre lo hace con amor y propósito.


Hoy, no te guardes lo que te duele. Llora si lo necesitas. Clama. Háblale. Y sobre todo, confía en que Dios te ve, te escucha y tiene poder para sanar.


Mira esta oración: https://youtu.be/vdHaf9NWLz0


Oremos:

Señor, hoy vengo delante de ti con todo lo que soy. Con mis heridas, mi dolor y mi cansancio. Tú me conoces mejor que nadie. Sana mi cuerpo, mi corazón y mi alma. Renueva mi fe, y ayúdame a descansar en tu amor. En el nombre de Jesús, amén.

4 Comments


RUBY ANABEL Ceron
RUBY ANABEL Ceron
hace 16 horas

Amén, Dios eres mi sanador🙌

Like

Lili Becker
Lili Becker
hace 2 días

Hola gracias 😊 bendiciones

Like

Olgalu
Olgalu
hace 2 días

Gracias mi Jehova Raffa

Like

Jimmy Hernández
Jimmy Hernández
hace 2 días

En el poderoso nombre Jesus hay sanidad en todo.💪🙌

Like
bottom of page