Hidratas lo seco en mi

miércoles 6 de 2024

Hidratas lo seco en mi - alguna vez has experimentado la gran sensación que da tener resecas las manos y poner un poco de crema hidratante o un día muy caluroso y tomar agua o algo hidratante, creo que es una de las sensaciones mas refrescantes y satisfactorias que podemos sentir, es una sensación que alivia una necesidad inminente en nosotros.

Nuestro corazón podría encontrarse de la misma manera, el tema aquí es que el corazón a diferencia que las manos y el cuerpo, se hidrata solo con el amor, presencia de Dios; no existe nada más que pueda darle renuevo. Todos aquellos que no conocen de Dios o que lo conocen y son tercos, intentan hidratar sus vidas espirituales con los productos que entrega el enemigo como lo son: "placeres humanos, alcohol, socializar con malas compañías, horas y horas en redes, etc..." son muchas las cosas que podrían ser utilizadas en este mundo para hidratar, pero terminan por no cumplir la tarea, al final siempre hay mas SED.

Entonces como sabemos que estas cosas no nos hidratan, ¿Cuál es la clave para hidratar nuestras vidas?, la palabra de Dios nos lo dice de manera clara y concisa; Jesus dice: Juan 4:14 TLA pero el que beba del agua que yo doy nunca más tendrá sed. Porque esa agua es como un manantial del que brota vida eterna. La única manera en que podemos hidratarnos es con JESUS de nuestra mano, no existe otra manera mas.

Quiero que con este devocional recuerdes renovar tu amor por tu Dios hoy, que podamos recordar que no existe otra manera de hidratar nuestras vidas. Gracias a Dios podemos tener esperanza, vida, animo y una vida llena de eso VIDA!.

OREMOS:

Amado Dios, venimos a Ti con corazones que a veces se sienten secos y vacíos. Reconocemos que nada en este mundo puede satisfacer nuestra sed espiritual, solo Tu presencia lo puede hacer. Jesús, gracias por ser el agua viva que renueva y da vida eterna. Te pedimos que llenes cada rincón de nuestro ser con Tu amor, que refresques y fortalezcas nuestro espíritu. Ayúdanos a buscarte con un corazón sincero, dejando atrás todo lo que no sacia verdaderamente. Que podamos vivir cada día recordando que solo en Ti encontramos la verdadera vida y plenitud. En el nombre de Jesús, amén.