27 de agosto 2024
En un mundo que cambia todo el tiempo y en relaciones que a veces parecen no durar, encontrar un amor que realmente sea constante y eterno es un gran regalo. Las dificultades y problemas a veces nos hacen dudar de que el amor pueda ser tan sólido. Pero, en medio de todo esto, podemos encontrar seguridad en el amor constante de Dios.
El amor de Dios es una certeza que nunca falla, siempre está ahí, sin importar lo que pase. La Biblia nos dice una y otra vez que el amor de Dios es para siempre y que siempre podemos contar con él, sin importar las circunstancias.
Mira lo que dice Jeremías:
"Con amor eterno te he amado; por eso te sigo extendiendo mi fiel amor."— Jeremías 31:3 (NVI)
Este versículo nos recuerda que el amor de Dios no tiene fin. La frase "amor eterno" nos asegura que Dios siempre nos ama, desde siempre y para siempre. Su amor es un abrazo constante que nunca se va.
Cuando te sientas inseguro o desanimado, recuerda que el amor de Dios no cambia. Él sigue amándote igual, sin importar lo que estés pasando. Su amor es la base firme sobre la que puedes apoyarte.
Hoy, tómate un momento para pensar en cuánto te ama Dios. Agradece por su amor inagotable y deja que esta verdad te llene de paz y esperanza. Aunque todo a tu alrededor cambie, el amor de Dios siempre estará ahí.
Oración:
Señor, gracias por tu amor que nunca se acaba. Ayúdame a recordar que, sin importar lo que pase, tu amor siempre está conmigo. Dame la fuerza para seguir adelante con la confianza de que me amas incondicionalmente. Amén.
Gracias Dios por tu amor inagotable 🙏
Amén🙏🏻Gracias Dios por tu amor y fortaleza
Gracias Dios porque tu amor nunca falla permanece por siempre
Gracias mi Señor Jesucristo por tu amor incondicional