8 de diciembre Salmo 37:7 (NVI) “Guarda silencio ante el Señor, y espera en Él con paciencia.” 1. El paciente que confía en el Médico Un buen paciente no se autosana, no se inventa diagnósticos y no se desespera en la sala de espera. Se sienta, respira y confía en que el Médico sabe lo que hace. La paciencia nace cuando dejo de querer controlarlo todo y permito que Dios sea Dios. 2. El paciente que sigue el tratamiento A veces Dios prescribe procesos, no pastillas instantáne